viernes, 9 de abril de 2010

Cambios y miedo.


Hay cambios. Constantemente, a nuestro alrededor hay cambios. Algunos los apreciamos y otros no. En nosotros hay cambios, en el ambiente, en las calles, en la gente, en los carteles de los andenes del metro, en los vagabundos que rondan por nuestra ciudad y en los fantasmas de nuestras cabezas. Nos asustan, nos inquietan, nos atraen y nos excitan. A veces los deseamos, y a veces no. Nos sorprenden, nos gustan, o no, pero por encima de todo, hay algo que siempre comporta el cambio, y es miedo.
Miedo a lo nuevo, a lo desconocido, a que falle.
De momento he empezado por el cambio pequeño, el color de pelo. La semana que viene vendrá un paso mayor, y si todo sigue como ahora, en setiembre será un gran paso para mi pequeña historia en el mundo.
Estoy temblando de miedo. De momento no es un cambio real, es algo prácticamente ficticio con tintes de realidad, algo que solo puedo percibir a lo lejos, en el horizonte, pero que cada vez sé que sentiré mas cerca. El problema no es el cambio en si, si no lo que este puede comportar.

De momento, he decidido que me daré a la bebida, como hizo Desmond al principio, y luego ya si eso, nos pondremos a ser prácticos.

1 comentario:

Emma Torralvo dijo...

tengo curiosidad por saber ese cambio de septiembre... yo también tengo uno para entonces :p :p